Refiero aquí las sabias palabras de Ethan McManus (un personaje de Ctrl+Alt+Del), que nos brindan consuelo a los que todavía no tenemos una consola de última generación.
No se equivoquen: Amo, idolatro, ADORO, a mi PlayStation 2. Pero puedo ver que el interés de manufactureros y vendedores, lógicamente, se desplaza hacia el PlayStation 3. Y al ver los sorprendentes resultados que el sucesor del PS2 puede brindar, lo comprendo bien.
Mi PlayStation 2 irá a un hogar feliz una vez que consiga el PlayStation 3, pues ya prometí que se lo regalaría a la KaiserGirl para que practique su inglés igual que yo lo hice.
2 comentarios:
guau!!! el ps2 es material didáctico... deberían ponerlo en los harmon hall :p
Sería más útil xP
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